Funcion de los lenguajes de programacion

Programación funcional python

Si quieres dominar un paradigma de programación relevante en el panorama tecnológico actual, considera la programación funcional. Es una forma simplificada, más limpia y más predecible de crear código. El código resultante también es más fácil de probar y mantener.

La programación funcional aprovecha el soporte del lenguaje mediante el uso de funciones como variables, argumentos y valores de retorno, creando un código elegante y limpio en el proceso. La PF también utiliza datos inmutables y evita conceptos como los estados compartidos. Esto contrasta con la programación orientada a objetos (POO), que utiliza datos mutables y estados compartidos.

Los lenguajes de programación funcional se centran más en las declaraciones y expresiones que en la ejecución de sentencias. Las funciones también se tratan como ciudadanos de primera clase, es decir, pueden pasar como argumentos, devolver de otras funciones y adjuntar nombres.

FP evolucionó a partir del cálculo lambda (λ-calculus), una notación sencilla para funciones y aplicaciones que el matemático Alonzo Church desarrolló en la década de 1930. Muchos lenguajes y dialectos de programación utilizan el paradigma funcional, como Scheme, Common Lisp (CL) y Elixir.

Programación funcional en c

Como programadores, a lo largo de nuestra vida nos vemos obligados a aprender más de un lenguaje de programación, y normalmente acabamos centrándonos en dos o tres con los que nos sentimos más cómodos. Es habitual oír a alguien decir que aprender un nuevo lenguaje de programación es fácil, que las diferencias entre los lenguajes radican principalmente en la sintaxis y que la mayoría de los lenguajes ofrecen más o menos las mismas características. Si conocemos C++, debería ser fácil aprender Java o C#, y viceversa.

Esta afirmación tiene cierto mérito. Pero cuando aprendemos un nuevo lenguaje, normalmente acabamos intentando simular el estilo de programación que utilizábamos en el lenguaje anterior. Cuando trabajé por primera vez con un lenguaje de programación funcional en mi universidad, empecé por aprender a utilizar sus características para simular bucles for y while y bifurcaciones if-then-else. Ése fue el enfoque que adoptamos la mayoría de nosotros, sólo para poder aprobar el examen y no volver la vista atrás.

Programación funcional

La programación funcional es un paradigma de la programación en el que podemos codificar todo utilizando únicamente funciones matemáticas. A diferencia de la programación OOPS, sólo se preocupa del "qué" y no del "cómo" resolver un problema. Con la programación funcional, aprender nuevas herramientas, paradigmas y perspectivas es más divertido y siempre da como resultado un código más limpio. Una forma compacta de programar es lo que ofrece un lenguaje de programación funcional. La reutilización del código y las mejoras de eficiencia resultantes, una legibilidad comparativamente mejor y una sintaxis fácil de depurar son algunas de las características por las que es conocida la programación funcional. Y, sobre todo, la mayoría de los lenguajes de programación funcionales funcionan bien en el ámbito de la ciencia de datos. Consulte estos 10 lenguajes de programación funcionales principales para mantener el efecto de la tendencia "conocida pero no desconocida" del desarrollo de software fuera de su curva de aprendizaje, al menos hasta cierto punto.

Un lenguaje de programación de propósito general, compatible con JVM y que evita la duplicación durante las llamadas a Java. Es muy accesible e interactivo para un estilo de programación multihilo. Aunque es un lenguaje compilado, ofrece características que son compatibles en tiempo de ejecución. Sus macros son famosas por su fea sintaxis, sin embargo, su cuerpo principal no necesita mucho relleno sintáctico.

Lenguaje funcional

En informática, la programación funcional es un paradigma de programación en el que los programas se construyen aplicando y componiendo funciones. Se trata de un paradigma de programación declarativo en el que las definiciones de funciones son árboles de expresiones que asignan valores a otros valores, en lugar de una secuencia de sentencias imperativas que actualizan el estado de ejecución del programa.

En la programación funcional, las funciones se tratan como ciudadanos de primera clase, lo que significa que pueden asociarse a nombres (incluidos identificadores locales), pasarse como argumentos y devolverse desde otras funciones, igual que cualquier otro tipo de datos. Esto permite escribir programas con un estilo declarativo y componible, en el que pequeñas funciones se combinan de forma modular.

A veces, la programación funcional se considera sinónimo de programación puramente funcional, un subconjunto de la programación funcional que trata todas las funciones como funciones matemáticas deterministas, o funciones puras. Cuando se llama a una función pura con unos argumentos dados, siempre devolverá el mismo resultado, y no puede verse afectada por ningún estado mutable u otros efectos secundarios. Esto contrasta con los procedimientos impuros, habituales en la programación imperativa, que pueden tener efectos secundarios (como modificar el estado del programa o recibir información de un usuario). Los defensores de la programación puramente funcional afirman que al restringir los efectos secundarios, los programas pueden tener menos errores, ser más fáciles de depurar y probar, y ser más adecuados para la verificación formal[1][2].